Muchas mujeres optan por usar tampones por las ventajas que conllevan. La incomodidad de las compresas han llevado a éstos a ser uno de los productos de higiene preferidos. Sin embargo, el material del que algunos están hechos puede suponer riesgos para la salud. ¿Quieres saber por qué? ¡Te lo contamos!
El problema de los tampones:
Según un estudio realizado en los Estados Unidos, las mujeres gastaron el año pasado más de 3 billones de dólares en productos de higiene, una cifra que se dice pronto pero que supone que ésta sea una de las industrias más rentables del mundo.
Ahora, un estudio llevado a cabo por Women’s Voice for the Earth (La Voz de las Mujeres para el Planeta) ha puesto en entredicho el uso de los tampones. Y no por su utilidad (eso nadie lo niego, y es que presentan más ventajas que otros productos de higiene para la menstruación), sino porque en muchos casos presentan materiales que pueden ser perniciosos para el organismo, como dioxinas, furanos y pesticidas.
El problema viene de que las empresas que se dedican a fabricar los tampones están consideradas como productoras de «utensilios médicos», por lo que no están obligados a especificar los materiales que utilizan.
En el caso de las cremas o los desodorantes, las empresas son consideradas como productoras de cosméticos, lo que cambia la regulación y les obliga a informar de los componentes de los que están formados.
¿Qué suponen las dioxinas?
Las dioxinas presentes en muchos tampones han sido supuestamente responsables de la aparición de endometriosis y casos de cáncer en mujeres.
La endometriosis supone que aparezcan tejidos del revestimiento interno uterino por fuera del útero. Aunque no se ha llegado a probar científicamente, muchas voces comulgan con la creencia de que las dioxinas crean problemas hormonales y esto puede llevar a aumentar el riesgo de endometriosis.
Por otro lado, las dioxinas también pueden causar cáncer. Según un estudio realizado en San Francisco con 4 marcas diferentes de tampones, las cantidades de dioxinas que se absorben con los tampones es inferior a la que se obtiene con la dieta.
Aún así, los tampones hechos de algodón contienen también pesticidas que se utilizan cuando la planta de algodón está en el campo. Aunque los estudios demuestren los contrario, la asociación de Voces de Mujeres para el Planeta pone en entredicho los resultados y recomiendo utilizar los tampones lo menos posible.
El Síndrome de Choque Tóxico:
¿Has oído alguna vez hablar sobre esta enfermedad? Se trata de una reacción del cuerpo producida por una bacteria. Normalmente ocurre cuando se usa un tampón más tiempo del debido o cuando un tampón se queda dentro de la vagina. No es muy común que suceda, pero es otro de los problema que aparecen con el uso abusivo de los tampones. Su síntomas abarcan desde fiebre hasta erupciones en la piel, diarrea, mareos y vómitos. Para evitarlo es muy importante que no uses el tampón más tiempo del debido y no abuses de su uso.
Como ves, aún no ha sido comprobado que los tampones causen enfermedades determinadas, pero las voces de alarma crecen día a día exigiendo a los productores que avisen de sus componentes y sus riesgos.
