Las fiestas y reuniones navideñas nos hacen comer de más y nos damos cuenta en enero cuando todo vueleve a la normalidad menos la figura.
Llegó el mes de diciembre y con ello el espíritu de celebración por el nacimiento del Niño Dios, el fin de un año y el comienzo de otro. Esta temporada se caracteriza por las reuniones entre familiares y amigos, ligadas a las tradiciones culinarias de cada país, por lo que se convierte en el momento ideal para darse algunos gustos gastronómicos que por lo general no nos permitimos el resto del año.
Cómo resistirse a las tradicionales recetas de pavo, cordero y cerdo; a las ensaladas frías, a los dulces y postres tales como: turrones, polvorones, panettone, figuritas de mazapán y qué decir de las bebidas: vinos, sidra, champán, entre otras.
Los expertos estiman que, durante las Navidades, en general solemos engordar aproximadamente 3 kilos de media, algo que se traduce en que, en sólo unos días, llegaremos a consumir absolutamente las mismas calorías que comeríamos, por ejemplo, durante una semana en cualquier otro momento del año.
Existen una serie de consejos básicos que nos ayudarán bastante durante esta época de fiestas, incluso si no deseamos aumentar de peso, o si tenemos problemas relacionados como la hipertensión, la diabetes, o nos encontramos realizando una dieta de adelgazamiento.
Consejos para evitar los excesos en Navidad
- Inicia el día haciendo ejercicio: Realizar ejercicio tanto los días previos a las cenas o comidas. De esta manera, quemaremos aquellas calorías consumidas que, por los excesos, nuestro cuerpo no ha utilizado.
- Pésate dos veces por semana: Uno de los problemas de la Navidad es que solemos descontrolarnos, pasando por alto nuestros hábitos alimenticios, y renunciamos a saber cuánto peso estamos ganando.
- No piques entre comidas: Durante estas Navidades hay que saber decir no a ciertas tentaciones y reservar el momento justo para disfrutar de la verdadera comida.
- Evitar ir a banquetes en ayunas: Una de las prácticas más habituales de las personas que tratan de no ganar peso durante la Navidad consiste en “reservar hambre” para las cenas, comiendo lo mínimo el resto del día. No es una buena idea. Si llegas a la cena de Nochebuena con un hambre espantoso lo más probable es que acabes comiendo mucho más de lo que deberías.
- Cuidar lo que se bebe: se recomienda tomar en cuenta que el vino tinto engorda menos que el blanco.
- Comer despacio: comer rápido, además de ser poco saludable, nos lleva a comer más. En las cenas y comidas navideñas se suele comer especialmente rápido, pues hay mucha comida, y los platos se suceden muy rápidamente. Concentrarse en comer despacio es la mejor manera de controlar lo que comemos y evitar indigestiones.
- Opciones sin azúcar: Si eres diabético, recuerda que existen en el mercado una serie de dulces típicos y turrones sin azúcar especialmente elaborados para personas con esta condición.
Una buena recomendación sería comer tranquilos y relajados, cuestión que nos ayudará a no padecer sobrepeso. Así que a seguir estas recomendaciones y disfrutar al máximo estas fiestas para el compartir en familia y entre amigos.
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