Respirar bien mientras hacemos ejercicio es fundamental, ya que lo primero que nuestro organismo necesita para ponerse en marcha es el oxígeno. Una correcta respiración te ayudará a aguantar más, cansarte menos y prevenir las agujetas, entre otras cosas.
Cuando realizamos ejercicio, los niveles de oxígeno que las células de nuestros músculos exigen es mayor. Por eso, nuestros pulmones se ensanchan y tendemos a respirar más rápido. Para asegurar que a tu organismo no le falte oxígeno, debes mantener unos niveles de glóbulos rojos elevados (se consigue consumiendo alimentos con hierro) ya que serán los encargados de transportar el oxígeno. Pero además, deberás aprender a respirar correctamente para que el aire que entra en tus pulmones pueda ser recogido por esos glóbulos y no desperdiciar el oxígeno. ¿Cómo se consigue esto? ¡Aquí te lo contamos!
Pautas para respirar correctamente
- Inspirar por la nariz y expirar por la boca: La nariz tiene su función. No es lo mismo inspirar por ésta que por la boca. Y es que la nariz actúa, para empezar, como filtro para bacterias y virus. Estos microorganismos indeseados quedan atrapados en el vello interior de la nariz, impidiendo que nos pongamos enfermos. También actúa como «calentador». El aire frío no es bueno para los pulmones, y podemos calentarlo si éste pasa primero por los conductos de la nariz. Para exhalar, utilizaremos la boca, ya que es una forma más rápida de deshacernos del CO2 que hay en nuestros pulmones.
- Mantener el ritmo: El aporte de oxígeno mientras hacemos ejercicio debe ser constante. El buen rendimiento dependerá de ello. Por eso, en vez de concentrarse tanto en el ejercicio en sí, es fundamental que nos fijemos en cada cuando tiempo respiramos. Es contraproducente aumentar el ritmo de respiración para terminar el ejercicio antes. Por contra, alarga más el ejercicio o hazlo más lento con el fin de conservar el ritmo.
- Llena el diafragma: Para asegurar que damos todo de nosotros mismos, hay que aprender a llenar el diafragma. Esto se puede conseguir realizando un sencillo ejercicio en casa: túmbate en la cama boca arriba y pon un de tus manos sobre el abdomen. A continuación, inhala aire profundamente por la nariz y luego suéltalo lentamente en 6 exhalaciones diferentes por la boca. Así ejercitarás el músculo del diafragma y lograrás llenar tus pulmones cuando practiques ejercicio.
Y si haces esto bien…
Si logras controlar tu respiración y asegurar a tu organismo con una buena dosis de oxígeno, verás como tu vida mejora, y no solo en el ámbito deportivo. Controlar la respiración es fundamental para las personas con problemas de ansiedad. Si logras respirar bien en el deporte, también lo harás en el día a día y podrás reducir tu estrés. Recuerda siempre que hay varios puntos negros que nunca debes hacer!
- No fumar
- No inspirar aire por la nariz
- No respirar rápido
- Evitar respirar el aire muy frío (en invierno puedes practicar deporte en el gimnasio)
Vegetariano, amante de los animales y poniendo mi granito de arena (que nada cuesta) para cuidar el planeta.
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